El espejo



Todo espacio donde se está haciendo algo ante las miradas de alguien es un espejo. Y aun es espejo también el espacio de nuestro cuarto de trabajo, de nuestro jardín, del lugar más íntimo donde transcurra un tiempo de nuestra vida. Pues que siempre, aun en los lugares en que no convivamos con nadie, dejamos una huella de nuestro estar y de nuestro paso. La disposición de los objetos que usamos, de los muebles que nos rodean o de las plantas y de las flores, si de nuestro jardín se trata, es un espejo: un espejo de cómo los tratamos y aun de la huella que sin darnos cuenta vamos dejando en cuanto tocamos, en cuanto nos rodea. Los trajes que usamos, los libros que leemos, son espejo.

Del artículo "El espejo de las aulas". María Zambrano.

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